Por Gabriel Cason (*)

En el running y durante la cuarentena por coronavirus, nuestra actividad se ve claramente afectada. Por eso, aprovechemos para incorporar con las herramientas que tenemos a mano ese valor agregado del entrenamiento invisible: descanso, recuperación, fortalecimiento, equilibrio y mucho más. Todos puntos que tanto agradecerá nuestro cuerpo cuando nos volvamos a poner las zapatillas para salir a correr. Todo, mientras cumplimos con el aislamiento social, preventivo y obligatorio.

Una buena noticia para nosotros los runners: cuando pase la cuarentena si hacemos bien los deberes, las calles, las montañas y las carreras van a estar ahí esperándonos, y podremos darnos ese abrazo todos transpirados que nos llena el alma.

Juntos, pero a distancia, saldremos mucho mejores de esta pandemia global.

Este lugar donde estamos, del cual somos todos responsables, no es un pozo, es un túnel y al final está la luz, y, por supuesto, vamos a por ella. Los corredores sabemos de qué se trata y cómo hacerlo. Como dice Alfredo Barragán, capitán de la Expedición Atlantis: ¨Que el hombre sepa que el hombre puede¨.

Veamos algunos puntos de conexión, porque lo hay, entre el running y esta cuarentena necesaria.

Ambas son multitudinarias.

  • El running es voluntario.
  • La cuarentena es obligatoria.

Ambas son por nuestro bien.

  • El running es en beneficio propio y por consiguiente también beneficia a la comunidad.
  • La cuarentena es en beneficio de la comunidad y por uno mismo.

Ambas nos ponen a prueba.

  • En el running nos ponemos a prueba con nosotros mismos.
  • En la cuarentena nos ponemos a prueba como comunidad.
  • En el running uno decide entrenar en búsqueda de un objetivo y sabe que para lograrlo hay que preprarse.
  •  La cuarentena nos sorprende a todos sin habernos preparado para transitarla.
  • En el running buscamos hacernos tiempo entre otras tantas actividades que nos imponen/imponemos para poder entrenar.
  • En la cuarentena, no importa cuántas actividades estábamos haciendo, estamos obligados a bajar un cambio, parar la máquina y mirar hacia adentro.
  • En el running, en el Rosedal sacaron los patos y/o gansos (o ellos, tal vez, se espantaron) para que podamos correr.
  • En la cuarentena, ¿habrán vuelto los patos y/o gansos?
  • En el running la preparación es previa a la competencia y puede llevar meses.
  • En la cuarentena debemos aprender estando adentro, sin preparación.
  • En el running nos inscribimos en una competencia voluntariamente y pagamos por ello.
  • En la cuarentena todos participamos sin inscribirnos, pero también tendrá un costo.
  • En el running, uno decide participar de carreras o no, carreras de calle o carreras de trail.
  • En la cuarentena, todos debemos participar, aunque no esté en nuestros planes.
  • En el running, si decidís correr una carrera, te preparás para estar en la línea de largada.
  • En la cuarentena, todos estamos en la línea de largada y debemos participar, no es optativa.
  • En el running, en las carreras, cruzar la línea de meta no solo depende de nuestra preparación y planificación, muchos imponderables entran en juego.
  • En la cuarentena, llegar al objetivo depende de nosotros y de toda la comunidad.
  • En el running, uno decide preparar o no una competencia, y los resultados serán una consecuencia de esa decisión.
  • En la cuarentena, los resultados serán consecuencia de nuestro compromiso durante la misma.

  • En el running, no cumplir con lo planificado, nos afecta directamente a nosotros.
  • En la cuarentena, no cumplir implica afectar también a los demás.
  • En el running prepararse a conciencia es una obligación y una responsabilidad.
  • En la cuarentena, cumplir es un acto de responsabilidad y conciencia ciudadana.
  • En el running, en carreras largas, se pasa por muchas sensaciones físicas, mentales y espirituales que te ponen a prueba, y uno se prepara para poder transitarlas.
  • En la cuarentena, se pasa por muchas sensaciones físicas, mentales y espirituales y si bien no nos preparamos, debemos saber que hay muchas herramientas internas para poder transitarlas.
  • En el running, durante las carreras es muy sano valorar lo recorrido y no estar lamentando todo lo que falta completar.
  • En la cuarentena, también debemos valorar todo lo realizado y no lamentar lo que falta.
  • En el running de hoy, la tecnología nos ayuda a optimizar nuestros entrenamientos y desarrollar mejor la actividad, pero el desempeño sigue dependiendo de nosotros.
  • En la cuarentena de hoy, la tecnología nos ayuda a estar conectados con el mundo exterior, pero depende de nosotros sacarle provecho y que no nos juegue en contra.
  • En el running, muchas veces estamos pendientes de nuestro reloj en búsqueda de bajar tiempos y nos olvidamos de las sensaciones que vamos teniendo, nos olvidamos del mejor sensor que traemos incorporado.
  • En la cuarentena, donde perdemos la noción del tiempo, que día y hora es, resulta todo más natural, las sensaciones están a flor de piel.
  • En el running, hoy en día hay muchos estímulos para participar hasta en varias carreras por fin de semana, hay que saber planificar y elegir en beneficio propio.
  • En la cuarentena, es una sola carrera y hay que participar, estés o no preparado y tengas o no tengas ganas, es en beneficio de la comunidad.
  • En el running, siendo para nosotros una actividad entre tantas otras, existen muchas actividades complementarias beneficiosas que por falta de tiempo y valoración, muchas veces dejamos de lado.
  • En la cuarentena, con tiempo disponible, es muy sano valorar y practicar esas actividades que en otro contexto dejamos para otro momento.

(*) Por Gabriel Cason, contador y ultramaratonista, atleta del Fila Running Team Carolina Rossi / Palermo.

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