Under Armour está desarrollando máscaras para entrenar
UA SPORTSMASK es una mascarilla facial reutilizable y resistente al agua, que ha sido diseñada, por el equipo de innovación de Under Armour en un tiempo récord. Esta mascarilla, primera en su tipo, funciona para reducir la propagación de las gotas de saliva en la respiración del usuario. En la parte superior presenta un puente nasal moldeable para ayudar a mantenerlo en su lugar y mitigar el flujo de aire a los ojos, lo que evita que las gafas se empañen. También se puede lavar y secar, por lo que es más ecológico que otras opciones desechables de un solo uso.
UA SPORTSMASK presenta un modelo único conformado por tres capas, diseñado para atletas durante el entrenamiento:
- CAPA 1: SEPARADOR DE TELA: Es ligero, pero tiene bolsas de aire para la estructura, por lo que queda fuera de la boca y la nariz para un mejor flujo de aire.
- CAPA 2: ESPUMA DE CÉLULAS ABIERTAS: la capa intermedia es transpirable y deja pasar el aire al tiempo que dificulta el paso de la humedad y el sudor.
- CAPA 3: UA ISO-CHILL: este tejido se siente fresco sobre la piel, estira y utiliza PROTX2, una tecnología antimicrobiana no metálica que inhibe el crecimiento de bacterias en la mascarilla.
En pruebas de laboratorio se ha demostrado que esta tecnología antimicrobiana llamada PROTX2™ ayuda a inhibir el virus COVID-19. Esta tecnología se encuentra en proceso de revisión por la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU. (EPA) para confirmar la eficacia de la sustancia tal como se aplica a la UA SPORTSMASK para ayudar a eliminar el COVID-19. Por su parte, Under Armour también tiene una patente pendiente sobre su diseño y construcción.
Las semillas para desarrollar la UA SPORTSMASK se plantaron a mediados de marzo, cuando Under Armour comenzó a fabricar máscaras faciales diseñadas por su equipo de innovación para distribuirlas junto con millones de equipos de protección personal (EPP) a organizaciones sanitarias y comunitarias para ayudar a combatir la propagación del virus COVID-19. Durante este proceso, el fundador de Under Armour, Kevin Plank, reconoció la necesidad de una solución de cuidado que ayude a los atletas durante esta pandemia. Llamó al equipo de innovación en Baltimore, quienes acababan de fabricar estas máscaras, para que se unieran a él en la búsqueda de un camino hacia a seguir y uno que fuera rápido.
“Tan pronto como finalizamos el diseño de nuestra mascarilla para protección personal, nos sumergimos directamente en el proceso de innovación de optimizar una máscara para el rendimiento durante el entrenamiento”, dijo Kyle Blakely, vicepresidente de innovación de materiales en Under Armour. “Sabíamos que nuestros atletas nos necesitarían para llegar rápidamente a una solución que les ayude a regresar al campo, una que priorizaría la salud y la seguridad y se adheriría a las indicaciones actuales de los Centros para el Control de Enfermedades y su Prevención (Centers for Disease Control and Prevention −CDC− por sus siglas en inglés)”.
Debido a las restricciones de distanciamiento social, la compañía volvió a sus raíces durante la fase de construcción de la máscara: el diseño de Plank y los materiales de Blakely fueron enviados a Ella Mae Holmes, una costurera de Under Armour y la que fuera la tercera empleada de la compañía que ayudó a desarrollar la camisa original de compresión de la marca. Holmes se puso a trabajar prototipos de máscaras de costura en su casa de Baltimore. Con las aportaciones del equipo y las pruebas en el desarrollo del producto, Under Armour encontró el éxito en la 13ª iteración de la máscara.
“La experiencia nos dijo que la tela y el rendimiento tenían que ser nuestro primer enfoque, por lo que nos propusimos encontrar una combinación de tela que creara una estructura que garantizara que la máscara cubriera la cara y ofreciera la máxima transpirabilidad”, agregó Blakely. “Aplicamos todos los aprendizajes en forma, sensación, facilidad y velocidad de fabricación a partir de la máscara facial que creamos para fines de cuidado persona el clínicas y hospitales. A lo largo de todo este proceso, la velocidad en el diseño y especial atención en la calidad y los detalles, fueron primordiales”.