San Silvestre, la última del año: de Buenos Aires a Madrid
El 31 de diciembre tendrá a las dos capitales celebrando el cierre del año con miles de atletas.
A lo largo de los 365 días del año los corredores encuentran el tiempo para entrenar sin importar el clima ni las obligaciones. Las fiestas no son excusa para dejar de correr y la organización de los festejos o el cansancio del primero no son justificativo suficiente para dejar de salir.
Para que esos kilómetros no sean en solitario existen varias opciones para compartir con la comunidad runner.
La carrera de San Silvestre es el nombre con el que se conocen las distintas carr|eras que se disputan anualmente el 31 de diciembre. La primera se celebró en San Pablo, Brasil, en el año 1925 inspirada en otra que se celebraba en París, la noche de Año Nuevo. Con el paso de los años la idea se instaló en todas partes del mundo.
Buenos Aires, la capital latinoamericana del Running, desde 2010 tiene su propia San Silvestre. El Obelisco será testigo de un acontecimiento inusual. El centro porteño reunirá a miles de corredores que se mezclaran con los trabajadores que el último día del año no tengan asueto. A las 8, desde la avenida 9 de Julio, los atletas recorrerán el único circuito urbano que atraviesa los lugares, monumentos históricos, calles y avenidas más emblemáticos de la ciudad.
Aunque el calor suele ser agobiante, para muchos lo importante no es la competencia en si misma, sino la posibilidad de compartir con otros, desde una charla con extranjeros de las bondades de la ciudad, hasta la hidratación -no es raro ver que se arme una guerra de agua-. Ese es el espíritu festivo que se palpa durante todo el evento.
Siempre nos queda Vallecas
La San Silvestre que se disputa en la capital española se ha convertido en la más importante del mundo, incluso por encima de la Paulista (uno de los clásicos más longevos del 31/12).
“Se preguntarán muchos si eso de la San Silvestre Vallecana es tan bueno como lo describen. ¿Más de 40.000 corredores? ¿Público con ganas de animar a los lados de la ruta? ¿Un recorrido rápido que atraviesa lo mejor de Madrid? Parecen demasiadas virtudes para una simple competencia atlética, pero lo crean o no, todo eso que conforma el mito es cierto”, afirma Ignacio Barranco Frías, periodista y atleta español.
En esta edición, la doble subcampeona olímpica Hellen Obiri buscará en Madrid el triunfo que se le escapó en 2018. En esta ocasión las grandes rivales de la keniata serán el trío de atletas del NN Running Team (las etíopes Degitu Azimeraw y Haven Hailu, y la israelí Lonah Salpeter).
“Vallecas es el lugar elegido por miles de corredores españoles (y cada vez más extranjeros) para dar las últimas zancadas de cada año. Allá se juntan los mejores especialistas con auténticos novatos. Diez kilómetros de pasión, fuerza y desenfreno. Diez kilómetros que nadie debería dejar de correr una vez en su vida. Por su recorrido, por su público, por su luz, por su día y su hora. Por todo”, agrega Nacho, que supo correr por debajo de los 33 minutos en esta prueba.