Sumergirse en la experiencia única de correr cerca del mar es un regalo para los amantes del running. Sin embargo, enfrentarse a la arena, el sol y la brisa marina requiere una adaptación consciente para aprovechar al máximo estos entrenamientos playeros.

Desde la adaptación gradual al nuevo entorno, hasta estrategias para enfrentar el sol y recomendaciones para contribuir al cuidado del medio ambiente, con el eco-friendly running. Con estos consejos, tus trotes en la playa no solo serán más disfrutables, sino también más beneficiosas para tu bienestar físico y el entorno.

Consejos para correr en la playa:

  1. Adaptación gradual al entorno: Tu cuerpo no es un camello, y enfrentarse a la combinación de temperatura y terreno de la playa requiere adaptación. Utilizá los primeros cuatro días con calma, evitá comparar tus entrenamientos con los de casa. Si sentís pesadez o náuseas, pará a tiempo; después de todo, estás de vacaciones y no vale la pena arriesgarse por un entrenamiento.
  2. Selección del horario adecuado: Aunque las vacaciones invitan a dormir hasta tarde, amanecer temprano para correr te ayuda a evitar la exposición al sol más intenso. Si eso no es posible, opta por correr al atardecer para minimizar la radiación solar.
  3. Protección solar integral: El reflejo del sol en la arena intensifica su efecto. Usá protector solar, lentes de sol, gorra y ropa técnica, liviana y clara.
  4. Estrategia de hidratación: La alta humedad, el calor y la brisa marina plantean desafíos a la hora de mantenerte hidratado. Cuidá tu agua del sol, repetí tramos o lleva líquido en un cinturón o la mochila.
  5. Evitar las playas concurridas: Aunque es tentador disfrutar de la vista en las playas de moda, es mejor dejarlo para después del entrenamiento. Las playas populares suelen estar llenas de gente, lo que dificulta correr relajado y cumplir tus objetivos de sesión.
  6. Recuperación en el mar: Terminá tu sesión de entrenamiento sumergiéndote en el mar. Aprovechá sus beneficios para recuperar tus músculos y disfrutá de las vacaciones sabiendo que completaste tu tarea.
  7. Eco-friendly running: Descubrí el plogging, la fusión de jogging y la expresión sueca “plocka upp” (agarrar). Al correr en la costa, además de los beneficios tradicionales, podés contribuir al medio ambiente agarrando desperdicios. Incorporá ejercicios como sentadillas o saltos para intensificar tu carrera y quemar hasta 300 calorías en una salida de 30 minutos, según expertos.
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