¿Qué le pueden aportar el Yoga y el Pilates a la rutina del corredor? Estas prácticas tienen sus pros y contras que se pueden adaptar a los objetivos de cualquier runner.

 Cuando los corredores se ven faltos de fuerza o flexibilidad el yoga y el pilates aparecen como buenas alternativas de entrenamiento cruzado. Aunque se trata de dos métodos totalmente diferentes, ambos comparten un sistema de entrenamiento físico y mental que se centra especialmente en el trabajo de la respiración, el fortalecimiento de la musculatura estabilizadora y el core.

En el desarrollo del Pilates se pretende además cuidar la correcta posición anatómica de la columna. Las clases se basan en movimientos lentos, acompasados con la respiración y la búsqueda de posiciones de elongación muscular y autoconocimiento corporal. Por su parte, las escuelas de yoga son muy variadas (y se adaptan a distintas necesidades).

Pros: MEJORAN EL TONO MUSCULAR, LA COORDINACIÓN, ACTITUD Y POSTURA CORPORAL: Con un buen profesor, son aptos para cualquier nivel de condición física. El trabajo de la respiración contribuye a liberar el estrés.

POCO PRESUPUESTO: Ambas disciplinas se pueden llevar a adelante en casa y requieren una inversión muy accesible para el bolsillo de cualquier corredor en lo que a material se refiere.

El elemento más imprescindible es, sin duda alguna, la colchoneta. Lo más importante es que sea lo suficientemente amplia para poder realizar los ejercicios en ella, tanto de pie como acostado. En cuanto al grosor del MAT, hay opiniones dispares porque se trata de una elección muy personal. Hay quienes lo prefieren fino porque aporta más estabilidad, mientras que otros la buscan más grueso para más comodidad al estar tumbado.

Los bloques de goma EVA, las bandas y las sogas son los accesorios más habituales. El primero sirve para acomodar el cuerpo en ciertas posturas, mientras que los otros dos ayudan a ejecutar los movimientos cuando la flexibilidad todavía no está muy entrenada.

EN CASA: buscar un lugar adecuado para la práctica. Elegir una espacio cómodo y tranquilo. Ese ambiente debe estar ordenado para favorecer la relajación y la concentración (y evitar los golpes).

FLEXIBILIDAD HORARIA: marcarse una rutina ayuda a ser constante. Elegir un horario tranquilo, sin ruidos, visitas o personas entrando y saliendo del ambiente es recomendable para evitar las distracciones.

Contras: POR SU CARÁCTER ESTÁTICO, CONSUMEN POCAS CALORÍAS Y PUEDEN RESULTAR ABURRIDO: El yoga y el Pilates son la antítesis de las clases en las que abunda la música y los movimientos ampulosos. En ambos casos es recomendable la supervisión por parte de un buen profesor, porque no todos los ejercicios son aptos para todos los deportistas. Un mal movimiento o una mala postura buscada para aliviar la espalda puede generar más dolor en esa zona o el cuello si no se resuelve con buena técnica el movimiento buscado.

ATENCIÓN A LOS GÉRMENES: es muy importante mantener limpia la colchoneta y ventilada después de cada sesión para tenerla lista para el próximo día.

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