Cuando alguien desempeña sus responsabilidades de manera adecuada, es fundamental tratarlo con el respeto que se merece. Este individuo es aquel que irradia una sonrisa incluso en los momentos más desafiantes, que demuestra una disposición constante para escuchar a los demás y ofrecer consejos cuando sea necesario. Cuando una persona cumple con excelencia en sus acciones, todos, incluso aquellos que puedan considerarse como rivales, lo recordarán adecuadamente: como alguien digno de elogio tanto por su calidad humana como por su profesionalismo sobresaliente.

El domingo pasado se conoció la noticia del fallecimiento del keniata que supo adueñarse con el récord del mundo en los 42k masculino, Kelvin Kiptum. La triste noticia no tardó en conocerse, como así también no tardaron en llegar los mensajes de apoyo a la familia de Kiptum y los que fueron directamente hacia el atleta.

Y si se habla del récord del mundo en maratón es difícil no pensar en el atleta keniano Eliud Kipchoge, quien perdió su preciado logro en los pies del joven Kiptum. A pesar de ser rivales, Kipchoge dejó eso de lado y comentó que está “profundamente triste por el trágico fallecimiento del plusmarquista mundial de maratón y estrella en ascenso Kelvin Kiptum“.

“Un deportista que tenía toda una vida por delante para alcanzar una grandeza increíble. Ofrezco mi más sentido pésame a su joven familia. Que Dios los consuele durante este momento difícil“, agregó el doble campeón olímpico.

Y este solo fue el comienzo de los cientos mensajes que recibió Kiptum. Desde presidentes de los más importantes entes deportivos y nacionales, hasta compañeros de profesión.

Querido por todos, odiado por ninguno:

El Presidente de Kenia, William Ruto, elogió a Kiptum como una estrella y lo señaló como un deportista extraordinario, que había dejado una huella en el mundo: “Posiblemente uno de los mejores deportistas del mundo que rompió barreras para conseguir un récord de maratón. Sólo tenía 24 años y, como héroe, triunfó en Valencia, Chicago, Londres y otras competiciones importantes. Su fuerza mental y disciplina eran incomparables“.

Asimismo, el presidente de World Athletics, Sebastian Coe, expresó su profunda tristeza por la pérdida del plusmarquista mundial: “Estamos conmocionados y profundamente entristecidos por la devastadora pérdida de Kelvin Kiptum y su entrenador, Gervais Hakizimana. Un atleta increíble que deja un legado increíble, lo extrañaremos muchísimo“, concretó.

Además, el cinco veces campeón olímpico Paul Tergat (actual presidente del Comité Olímpico Nacional de Kenia), describió este acontecimientos como una tragedia monumental: “Mi más sentido pésame a su familia y a la del entrenador Gervais, a la fraternidad deportiva y la de atletismo por este momento de dolor y luto“.

A su vez, David Rudisha, poseedor del récord mundial de 800 metros masculino, expresó su consternación y profunda tristeza por el fallecimiento de Kelvin Kiptum. Rudisha ofreció su más sentido “pésame a las familias, amigos, la fraternidad atlética y a Kenia en general“.

Y más allá de las fronteras de Kenia, Joshua Cheptegei, el doble plusmarquista mundial de Uganda, también lamentó la trágica noticia, y destacó la pérdida de un talento significativo. Cheptegei extendió sus condolencias a las familias, amigos y aficionados al atletismo en todo el mundo, y lamentó que los accidentes de tráfico hayan privado al mundo de un gran talento.

Esos fueron un puñado de los cientos de mensajes que fueron escritos desde el corazón. Kelvin Kiptum siempre será recordado dentro del mundo del deporte, no por su récord, sino por cómo fue como persona.

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