La época del año en la que hace más calor es la más esperada entre la mayoría de las personas, dentro de todas las ventajas que tiene tener una temperatura alta, también existen sus contras y no hay que pasarlas por alto, debido a que una alta temperatura, de más de 40º grados a lo largo del día y superiores a 20º por la noche, te pueden los afectar al momento de entrenar.

Si bien que haga calor no significa que te quedes encerrado en tu casa todo el día con el aire/ventilador prendido, pero fíjate bien a la hora que tenés pensado salir a entrenar a la calle. Lo más conveniente es que esté un poco bajo el sol, ya sea en las primeras horas de la mañana o en las últimas horas de la tarde. El único momento del día en el cual se combinan temperaturas no tan altas y luz, es el amanecer, por eso siempre es bueno correr a esta hora. Siempre evitar las horas comprendidas entre las 10am y las 4pm.

Por otro lado, si entrenás en lugares cerrados, estos tienen que ser frescos y bien aislados. Una zona cerrada puede provocar un aumento de calor muy rápido y se mantiene durante más tiempo, por lo que es mejor evitar este tipo de espacios.

La temperatura actual y el pronóstico extendido están a un clic de distancia, ya sea en la web, la pantalla del televisor o una aplicación. Mantenerse informado es el comienzo del buen plan para combatir el calor durante el día y, en especial, durante los trotes.

Para poder seguir con tu plan de entrenamiento, vas a tener que tener en cuenta ciertos consejos para correr cuando las temperaturas son muy elevadas:

  •   Hidratarse bien: Se debe prestar especial atención a este tema, tomar por lo menos 250ml antes de correr y de dos a cuatro tragos cada 15 minutos cuando se está entrenando.
  •   Correr con la ropa apropiada: Usar ropa ligera, elaborada con materiales especiales que secan el sudor más rápido, evitar el algodón que absorbe el calor y la humedad.
  •   Proteger tu piel: Los rayos del sol no son buenos para la piel, hay bloqueadores solares deportivos, con una protección mínima de 30 o 50. 
  •   Bajar la temperatura: Siempre ponerse agua o hielo en la cabeza, para evitar de esta forma el golpe de calor.
  •   Cubrirse del sol: Usar lentes de sol que actúen para bloquear los rayos UVA y UVB, y también gorras o visera para proteger tu cara y ojos.
  • No ponerse objetivos elevados: En una carrera o entrenamientos, los tiempos serán distintos cuando hace mucho calor, por eso no es bueno ponerse parámetros que estén lejos de lo que estás acostumbrado a hacer. La sobre exigencia puede repercutir de manera negativa.
¿Qué te pareció esta nota? Dejanos tu comentario y compartila